Por: Richard Prieto/*Exclusivo

En el actual contexto de la pandemia por COVID-19, muchos se preguntan cuándo y cómo reiniciar sus diferentes actividades físicas y deportivas. Si bien es cierto que muchos pacientes que pasaron la enfermedad de manera asintomática o con un cuadro clínico leve, retoman por si solos sus actividades rutinarias de forma precoz y sin mayores percances, también es preciso tener en cuenta que existen complicaciones y secuelas propias de la enfermedad, fundamentalmente para aquellos que sufrieron de formas graves de la misma, que impiden o retardan la incorporación a la cotidianeidad. Muchas son las secuelas y complicaciones de esta enfermedad; en la actualidad se han llegado a reportar hasta 200 síntomas asociados a la misma y se ha descrito el daño multisistémico en el organismo, siendo la afectación neurológica la más frecuente de todas.

Algunas de las complicaciones de la infección por SARS-CoV-2 son el síndrome post-COVID-19 y la COVID persistente, las cuales se caracterizan por la persistencia de signos y síntomas clínicos que surgen durante o después de padecer la enfermedad y pueden permanecer hasta meses después, pudiendo causar brotes. Los adultos mayores y aquellas personas con otras afecciones de base son los que frecuentemente presentan síntomas persistentes de la COVID-19, pero incluso se han reportado casos de personas jóvenes y sanas que pueden sentir malestares durante semanas a meses después de la infección. (1)

El síndrome de fatiga crónica post COVID es una de las mayores preocupaciones para los pacientes que desean incorporarse a sus rutinas deportivas, pudiendo encontrarse en algunos reportes de autores hasta en más del 50 por ciento de los que han padecido de COVID-19. Esta afección no es exclusiva de esta enfermedad, pero se ha visto muy relacionada con la misma.

Existen criterios médicos (2) bien definidos para diagnosticar este padecimiento, pero todos giran en torno a que existe “intolerancia al ejercicio” y esto debe de ser identificado tanto por el paciente como por el médico que lo atienda. Existen algunas señales útiles para identificar la fatiga durante la realización de actividades físicas, como pueden ser la falta de aliento o agitación respiratoria, mareo, vértigo, sudoración, cansancio marcado, palpitaciones y pulso demasiado acelerado.

Existen otras complicaciones que deben ser descartadas por profesionales de la salud, que, en caso de no ser detectadas a tiempo, pueden causar serios problemas y llegar incluso a poner en riesgo la vida de los pacientes. Tal es el caso de las pericarditis y miocarditis, que son afecciones inflamatorias de la bolsa que recubre el corazón y del músculo cardiaco respectivamente, que pueden aparecer tras una infección viral como la del SARS-CoV-2. Por lo general son condiciones graves que requieren de atención médica especializada y de no ser tratada, el paciente corre peligro. Algunos de los síntomas característicos pueden ser dolor en el pecho, fatiga, hinchazón en los pies, dificultad para respirar y palpitaciones. La fibrosis pulmonar es otra afección frecuente, sobre todo en aquellos que presentaron cuadros inflamatorios severos a nivel pulmonar, con la consecuente discapacidad cardiaca y respiratoria, progresiva e irreversible.

Retomar la actividad física o la práctica de deportes no debe ser tomado a la ligera. Es imprescindible para todos optar por un examen médico detallado y de calidad, enfocado en descartar la presencia de algunas de las complicaciones más frecuentes o peligrosas, y que permita determinar el estado de salud favorable para ser dado de alta, con la consiguiente reincorporación a las actividades habituales del paciente. La realización de actividades físicas después de haber padecido de COVID-19 es un acto que requiere especial atención. Tener la seguridad de una recuperación plena para salir a correr, montar bicicleta o realizar cualquier otra actividad sin exponerse a riesgos, garantiza un mejor desempeño tanto física como emocionalmente y evita daños en las personas, incluso la muerte.

Referencias

1- Yung-Fang T, Chian-Shiu C, Yarmishyn AA, Lin YY, Luo YH, et al. (2020) A review of SARS-CoV-2 and the ongoing clinical trials. Int J Mol Sci 21: E2657
2- Institute of Medicine (US), Committee on the diagnostic criteria for myalgic encephalomyelitis/chronic fatigue syndrome. Beyond myalgic encephalomyelitis/chronic fatigue síndrome-Redefining an illness: report guide for clinicians. 2015. URL: https://www.nap.edu/resource/19012/MECFScliniciansguide.pdf. Fecha última consulta: 30.04.2021.